Hola amigos, gracias a @contrafoto21 y @javierspike por las instantáneas de la noche abierta 2013. De nuevo agradecer a la participación de los activistas que han podido realizar esta acción. Ha sido muy difícil seleccionar unas 50 fotos a nivel global con los últimos acontecimiento de estos 3 años aprox., desde las primaveras árabes hasta la última huelga por la Educación en España. Seguimos haciendo acciones denuncia, informando y formando a la ciudadanía. Gracias por estar ahí.
La Alta Nobleza Castellana, personalizada esta vez por el Marqués de la Motilla y su hijo, el marqués de Valencina, ha desalojado de sus posesiones a los plebeyos andaluces que las habían ocupado para guarecerse de las inclemencias del tiempo. Y lo han hecho sin la más mínima consideración, dando orden de que se destrozara cuanto pudiera ser útil para su habitabilidad (sanitarios, azulejos,… incluso los juguetes de los niños), orden que, tristemente, ha sido cumplida por la Policía Nacional en una actuación que pone en entredicho su carácter público y de protección de los intereses de los ciudadanos, ya que destrozar mobiliario y bienes, así como cumplir la orden de un particular, no puede considerarse protección de ningún tipo.
En efecto, Miguel Ángel de Solís y Martínez de Campos, actual marqués de la Motilla y primer marido de Carmen Tello, la fiel amiga de la duquesa de Alba, ha ordenado desalojar a cinco familias humildes que se habían realojado en otras tantas viviendas que llevaban varios años vacías y que son propiedad de este noble supuestamente sevillano. Y no contento con ordenar el desalojo, también ha ordenado a la policía (que no me explico por qué tienen que obedecer sus órdenes) que destrocen todo aquello que pudiera servir para hacer habitables estas viviendas. ¿No recuerda esta actuación a la de los señores feudales que en el medievo mandaban a sus mesnadas para que arrasaran las propiedades de sus enemigos o de sus súbditos díscolos? Lo realmente preocupante es que la Policía Nacional sea utilizada por estos caciques como si de sus propias mesnadas se tratase.
¿Perderemos también el reconocimiento como ciudadanos y pasaremos a ser siervos de la Gleba, como en la Edad Media, sin ningún derecho y a expensas de lo que decidiera el señor feudal?
El futuro nos lo dirá.
En efecto, Miguel Ángel de Solís y Martínez de Campos, actual marqués de la Motilla y primer marido de Carmen Tello, la fiel amiga de la duquesa de Alba, ha ordenado desalojar a cinco familias humildes que se habían realojado en otras tantas viviendas que llevaban varios años vacías y que son propiedad de este noble supuestamente sevillano. Y no contento con ordenar el desalojo, también ha ordenado a la policía (que no me explico por qué tienen que obedecer sus órdenes) que destrocen todo aquello que pudiera servir para hacer habitables estas viviendas. ¿No recuerda esta actuación a la de los señores feudales que en el medievo mandaban a sus mesnadas para que arrasaran las propiedades de sus enemigos o de sus súbditos díscolos? Lo realmente preocupante es que la Policía Nacional sea utilizada por estos caciques como si de sus propias mesnadas se tratase.
¿Perderemos también el reconocimiento como ciudadanos y pasaremos a ser siervos de la Gleba, como en la Edad Media, sin ningún derecho y a expensas de lo que decidiera el señor feudal?
El futuro nos lo dirá.